La importancia del diagnóstico en el Cáncer de Mama

La mayor parte de los cambios del tejido mamario son benignos y fáciles de tratar: por ejemplo, los quistes no malignos en los senos suelen estar llenos de líquido o se deben a un engrosamiento a causa de la menstruación. Sin embargo, cualquier cambio anormal podría ser una señal de cáncer. 

Determinar exactamente de qué clase de tumor se trata, es esencial para establecer el tratamiento más adecuado.

 

 

Si durante el examen manual tu medico ha detectado un bulto, engrosamiento o cualquier otro tipo de cambio en el tejido mamario, se te realizará una mamografía o una ecografía. Las imágenes radiográficas tomadas identificarán las llamadas "microcalcificaciones", que son pequeños depósitos de calcio.
En la mayoría de las mujeres, estos depósitos son causados ​​por inflamaciones inofensivas. Pero también pueden ser un indicador del crcimiento de un tumor maligno.
Si existe alguna duda, se realizarán pruebas de imagen adicionales. Si las imagines no son concluyentes, se tomará una muestra de tejido (biopsia) para confirmer cualquier tipo de diagnóstico. El resultado de la biopsia mostrará si el cambio en el tejido mamario es benigno o maligno. Los nuevos equipos de mamografía digital en 3D y de resonancia magnética están disponibles para obtener información adicional.